Adhara Fitz

• Habilidades: es muy sigilosa, se mueve con rapidez y tiene un talento innato para trepar.

• Virtudes: sabe escuhar y analiza todo lo que oye, el problema es que casi nunca responde.

• Manías: se muerde constantemente tanto las uñas como el labio inferior.

• Miedos: Que le ocurra algo a Alan.

• Gustos: le encanta el silencio y la soledad.

• Disgustos: la gente en general y los hombres en particular

Adh :: Molly Quinn :: Nómada :: 20 años :: 07/07/2116 :: Cazadora/Recolectora ::Bastón :: Heterosexual

Historia y Familia

Adhara no tiene Padres ni hermanos. Su madre murió en el parto y su padre en una guerra de tribus cuando tenía seis años. Prácticamente fue criada por Alisa, una mujer de la tribu menor a la que pertenecía. Cuando Adhara cumplió los diez años, Alisa tuvo un hijo llamado Alan que, la chica consideró siempre como a su hermano pequeño aunque pocas veces le había demostrado signos de afecto.

Un día, la tribu de los Uruk irrumpió en el edificio abandonado donde la tribu de Adhara y Alan se había asentado. Lo destruyeron todo y arrasaron con los víveres y las existencias que tenían. Mataron a todos los hombres y mujeres que encontraron a su paso y estando a punto de marcharse, abrieron el único armario en el que aún no habían mirado encontrando allí escondidos a los dos chicos. Sin pensarlo demasiado, el Uruk se los llevó como prisioneros para destinar a Alan al ejército y a Adhara como futura madre de sus hijos. Unos días después de su llegada a la nueva tribu de los Uruk, Adhara intento escapar refugiándose en una iglesia abandonada que había cerca del asentamiento, no sin antes prometerse a sí misma que volvería a buscar a Alan. Sin embargo, el Uruk que siempre la vigilaba muy de cerca la siguió e intentó violarla. Fue entonces cuando apareció aquel extraño chico que se sumergió en una pelea con el Uruk hasta que éste último consiguió escapar en busca de refuerzos. El nombre de aquel chico era Ventus, quien le dio su capa a Adhara para que se tapara al tiempo en el que llegaban a la iglesia dos personas más que parecían conocer a Ventus.

Hank y Margaret eran un matrimonio Nómada que habían acompañado a Ventus hasta el asentamiento Uruk. Ventus dejó que se llevaran a Adhara con ellos mientras él se iba tras el Uruk que acababa de escaparse. La chica, aún en estado de shock, se metió en la desvencijada camioneta del matrimonio que condujeron durante horas hasta llegar a un edificio abandonado y ruinoso que parecía haber sido un banco tiempos atrás. Una vez allí Hank le enseñó a Adhara dos habitaciones enormes que era cajas fuertes, una de ellas llena de comida y la otra llena de armas. Más tarde enrrolló una alfombra roja que había en el vestíbulo del edificio y que ocultaba una trampilla por donde desapareció indicándole a Adhara que lo siguiera. El sótano del edificio era un remolino de pasillos oscuros que desembocaban, la mayoría en habitaciones con camas hechas de paja, una vez Hank le dijo cuál sería su habitación Adhara se encerró tras la gran puerta de roble y dejó que pasaran los días antes de dignarse a salir de allí.

Personalidad

Adhara es una persona fría y solitaria. No le gusta la compañía, prefiere el silencio y sumergirse en sus pensamientos. Rara vez la escucharás hablar, mucho menos si no te conoce de nada, pues no le gusta perder el tiempo y tampoco las caras nuevas.

Es muy desconfiada, si quieres algo de ella tendrás que esforzarte por ganarte su confianza y no te lo pondrá nada fácil. Cree que el mundo no tiene solución alguna, que todos piensan en sí mismos y no buscan una armonía juntos. Suele llamar a los demás “enfermos o zombies” refiriéndose a que están cegados por el ansia de poder.
Adora las historias, sobre todo las antiguas en las que el mundo aún estaba vivo, sin embargo al mismo tiempo odia a todos sus antepasados por no cuidar debidamente el planeta y no haber dado la oportunidad a los demás de conocer las cosas bellas que hubo en él.

Es indomable y rebelde, capaz de hacer oídos sordos si lo cree oportuno. Observadora y analítica. Le da muchas vueltas a las cosas y siempre busca una manera de hacerlas mejor, no le gusta nada equivocarse. Es una persona constante que no se rinde con facilidad. Fuerte y de ideas claras.